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Las horquillas vuelven a sonar en el Casco al compás de las nuevas generaciones

Había ganas de volver a escuchar el golpear de las horquillas contra el empedrado del Casco, había ganas de disfrutar de la banda de cornetas y tambores de la Junta de Cofradías, había ganas de volver a ver las túnicas desfilando por las callejuelas de la parte alta de la ciudad.

Aunque haya sido en versión infantil, numeroso público se ha dado cita este sábado por la mañana en el entorno del barrio del Salvador para disfrutar de la procesión versión kids de la Junta de Cofradías, con calles abarrotadas y un sinfín de móviles y cámaras que han querido inmortalizar el desfile.

Minutos previos a las 11.00 horas, cuando daba inicio este cortejo procesional después de dos años de parón por la pandemia, una abarrotada plaza de San Andrés ya esperaba la salida de los 24 pasos de las 23 hermandades que han formado parte del desfile.

No ha podido faltar la versión infantil de Jesús Entrando en Jerusalén para abrir el desfile, tras el cual han empezado a procesionar los pasos del Cristo de la Vera Cruz, San Juan Bautista, Medinaceli y la virgen de la Esperanza.

De la procesión del Silencio del Miércoles han tenido representación los pasos de la Santa Cena, Oración en el Huerto de San Esteban, Prendimiento, Negación, el Ecce-Homo de San Miguel y la virgen de la Amargura con San Juan Apóstol.

Paz y Caridad llegaban con el Huerto de San Antón, Jesús Amarrado a la Columna, Jesús del Puente y nuestra señora de la Soledad del Puente.

La procesión Camino del Calvario ha estado representada por los pasos de San Juan Evangelista, y nuestra señora de la Soledad de San Agustín, quien ha incluido el palio de la virgen en su versión infantil.

Ya En el Calvario, han desfilado por las calles del casco conquense el Cristo del Perdón, con el ‘pasete’ de La Exaltación, el Cristo de la Agonía), la hermandad del Cristo de la Salud con el paso infantil de El Descendimiento y, cerrando la tarde del Viernes Santo, la Virgen de las Angustias.

En cuanto al Santo Entierro, ha abierto camino la Congregación de nuestra señora de la Soledad y de la Cruz, con el ‘pasete’ del Yacente y una jovencísima ‘manola’ delante del paso llorando la muerte del Señor.

El Domingo de Resurrección ha estado presente al completo con las imágenes de Jesús Resucitado y María Santísima del Amparo.  Una mañana que, aunque nublada, no ha amenazado lluvia y que ha permitido a todo el público que ha subido hasta la parte media del Casco disfrutar de una procesión infantil en la que los conquenses más jóvenes ya han ido calentando para, en un futuro, seguir haciendo grande la Semana Santa de Cuenca.