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“Fui a Cuenca a ver a Tallis Schollars como si fuera a ver un concierto de Guns N’ Roses a Los Ángeles”

Simón Andueza es el director de Gradualia, grupo vocal de cámara especializado en música anterior a 1750 que actuará el día 6 de diciembre en la iglesia de San Pedro dentro del Ciclo de Adviento de la Semana de Música Religiosa de Cuenca.

Me chivan que tiene una bonita historia relacionada con Cuenca.

En mi juventud, en los años noventa, estaba descubriendo la música antigua y vocal, el siglo XVI, que es a lo que nos dedicamos en Gradualia. Yo era un fanático de los grupos extranjeros que grababan discos en aquella época. Yo vivía en Pamplona cuando me enteré de que en Cuenca iban los Tallis Schollars, uno de los mejores grupos del mundo de polifonía renacentista y como en aquella época no iban a mi tierra estos grupos, ni corto ni perezoso me compré una entrada por teléfono, porque entonces no había venta por Internet. Como están tan mal comunicados Pamplona y Cuenca me tuve que coger un autobús, dormir en Madrid, ir a Cuenca, ver el concierto y hacer la operación contraria. Como si fuera a ver un concierto de los Guns’n Roses a Los Ángeles, me fui a a Cuenca a ver a los Tallis Schollars. Después del concierto les pedí autógrafos a todos. Dirigir ahora un grupo profesional de música antigua y hacerlo en Cuenca es realmente un orgullo, un honor y una responsabilidad, porque sé que gente excelente ha estado allí.

Por tanto, conoce de sobra la trayectoria de la Semana de Música Religiosa de Cuenca.

Por supuesto, he estado otras veces como espectador.

¿Algún otro concierto que recuerde especialmente?

Me acuerdo del grupo de La Colombina, que hicieron la integral del oficio de Semana Santa de Tomás Luis de Victoria, tres conciertos seguidos en la iglesia de San Miguel. Eso fue precioso.

¿Esta actuación en el Ciclo de Advierto será su debut artístico en la Semana?

Como Gradualia sí, pero he cantado con el coro de la Comunidad de Madrid con obras grandes, como el Réquiem de Mozart o de Verdi.

Tras bastantes años me decidí a formar mi propio grupo para hacer el repertorio que a mí me gusta”

Preséntenos el proyecto de Gradualia.

Gradualia es mi apuesta personal. Yo me dedico a cantar en el Coro de la Comunidad de Madrid, pero realmente a mí la música que más me gusta del mundo es la de cámara, vocal, de los siglos XVI y XVII. Tras bastantes años me decidí a formar mi propio grupo para hacer el repertorio que a mí me gusta y de la forma que a mí me gusta. Es el mayor de los placeres. Cuando estás satisfecho del trabajo es tocar el cielo.

Antes de la interpretación, de subirse al escenario, hay un trabajo previo de investigación.

Sí, porque hay mucha música que ahora mismo está casi perdida. No está editada, no está grabada y hay que estudiarla. Hay un trabajo previo muy importante de investigar y de sacar la luz música que está muy olvidada. Hay un trabajo muy duro antes de llegar al concierto.

En este caso en su repertorio en Cuenca predominarán los textos marianos.

No solo marianos. El programa se llama ‘No temas, María’ porque es todo música de adviento y en esta época la protagonista fundamental es casi siempre la virgen María. Ne timeas, Maria, de Tomás Luis Victoria, es el título de uno de los motetes más bonitos que hay en el programa, que es cuando el ángel le dice a María que no tema, que va a dar a luz a un niño que va a ser el salvador del mundo. Además hay textos sobre San Juan Bautista, el profeta Isaías anunciando la venida de Cristo… Temas de adviento, no solo marianos.

Alonso Xuárez creo que es un músico que debería rescatarse”

En el repertorio rescatarán un motete de un maestro de la Catedral de Cuenca, Alonso Xuárez.

Es un motete que se llama Canite tuba, que es a dos coros, muy bonito, y que está basado en el mismo motete de Francisco Guerrero, que lo interpretaremos también. Es una música preciosa, muy alegre y creo que gustará mucho al público. Son obras editadas y casi nadie las canta, es una pena. Creo que la capilla de música de la Catedral de Cuenca ha hecho algo de Alonso Xuárez, pero creo que es un músico que debería rescatarse y hacer conciertos e incluso grabaciones.

Una de las piedras de la filosofía de la Semana de Música Religiosa es precisamente rescatar lo que está en los archivos, casi escondido.

Así es. En nuestro repertorio, aparte de compositores españoles muy conocidos como Tomás Luis de Victoria, Morales o Guerrero, hacemos también polifonistas extranjeros, los ingleses William Byrd y William Mundy. Son una maravilla y en España prácticamente nunca se ha escuchado esta música. De Giovanni Pierluigi da Palestrina también hacemos una obra muy bonita a doble coro. El repertorio es muy bonito y muy variado, desde cuatro voces a ocho voces en dos coros. Va a ser muy ameno.

Actuarán en la iglesia de San Pedro.

Una iglesia circular, creo que nunca se ha hecho un concierto de la Semana allí. No sabemos cómo va a sonar, realmente es una incógnita para todos, pero también es muy bonito. Estaremos el día anterior en Cuenca y podremos ensayar en la iglesia, eso va a ser una tranquilidad para nosotros, podremos ajustar la interpretación a la acústica de la iglesia, según la reverberación que tenga, lo agradecemos mucho.

Gradualia ha recorrido muchos sitios de España pero en su trayectoria llama la atención que estuvo en Seúl.

Estuvimos hace cinco años en Korea del Sur y cantamos en la catedral anglicana, una iglesia neorománica preciosa. Majísimos. Grabamos un vídeo y estuvimos cantando en una celebración con el arzobispo de Seúl, fue una experiencia muy especial en un sitio tan lejano. Además hemos estado en toda España: Gran Canaria, Madrid, Zamora, Segovia, Ávila…

¿Se ha dado bien este año de reapertura?

Ha costado, pero ahora en diciembre, y es una cosa rarísima, hay un montón de conciertos y festivales que de repente han dicho “ya”. Había mucha gente que no se atrevía, pero ahora se está volviendo a los escenarios y el público también está volviendo.

¿Es posible que la música antigua haya ganado público nuevo durante el confinamiento?

No lo sé. En el confinamiento se oía mucho de todo. Estábamos en casa y seguro que habrá habido gente que haya descubierto música, otros habrán descubierto películas…

Broncano va a hacer que este festival resurja después de estos tiempos tan raritos que ha tenido”

¿Conocía anteriormente a Daniel Broncano, director de la Semana de Música Religiosa de Cuenca?

Lo conozco por otros festivales que dirige, sobre todo el de Música en Segura, en la sierra de Jaén. En un pueblo muy pequeño ha conseguido un festival excepcional, con gente que va allí únicamente por el festival en unos parajes idílicos, tanto naturales como arquitectónicos. Ha hecho una labor magnífico y creo que va a dar mucho empuje a la Semana de Música Religiosa de Cuenca. En materia de comunicación se están moviendo muchísimo y el Ciclo de Adviento es una idea magnífica. Hay otros momentos excepcionales para la música religiosa más allá de la Semana Santa. La gente no sabe, por ejemplo, que hay muchísima música maravillosa de adviento de la época que nosotros cantamos y está esperando a ser descubierta por el aficionado. Creo que, con las ganas y la experiencia que tiene, Broncano va a hacer que este festival resurja después de estos tiempos tan raritos que ha tenido entre unas cosas y otras.

¿Para Gradualia el Ciclo de Adviento puede ser también una oportunidad para ganarse un hueco para la Semana de Música Religiosa?

Hombre, para nosotros sería una maravilla estar en el ciclo principal, pero de momento queremos hacerlo muy bien el 6, no quiero ser agorero. Intentaremos hacerlo bien y demostrar que Gradualia no desmerece de otros grupos que puedan venir. Prefiero ir pasito a pasito.

¿Qué le diría al público conquense para animarle a asistir?

Yo invitaría sobre todo a los nuevos públicos, a gente más joven o más alejada de este tipo de música que a veces se asocia con la gente mayor o con otra época. La música es de una calidad increíble, comparable a grandes compositores que vinieron después. Eran los mejores compositores de los siglos XVI y XVII y creo que van a sorprenderse con la calidad de la música y la espiritualidad qué viviremos. Yo siempre explico un poco qué significan los textos para que el público sepa qué está escuchando, porque es un lenguaje al que la gente no está acostumbrada. Es una música que va a servir para sus almas. Estamos ahora muy necesitados de música. Hay gente que dice que le ayuda la música chill out, esta le va a servir muchísimo más.

Foto: Paloma Friedhoff y Víctor Cruz











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