La Asociación de Clubes Deportivos de Cuenca ha enviado un comunicado de apoyo al San José Obrero por lo que consideran es una “puñalada trapera” del Ayuntamiento al equipo rojillo, así como al Ciudad Encantada, Adheridos “y todos los usuarios de las 500 tendrán que seguir esperando para tener un campo en condiciones dignas para la práctica deportiva”.
La asociación recuerda que espués de recibir una ayuda por parte de Diputación de más de 425.000 euros y aportar el Ayuntamiento de Cuenca 500.000 este último sacó a licitación el pliego para el campo Obispo Laplana y el Joaquín Caparrós por un importe total de 988.513,60 euros IVA incluido (información disponible en la página de contratación del sector público). Finalmente se licitó con la empresa EULEN, la cual se quedó la misma con un presupuesto de 837.460 euros IVA incluido (información página ayuntamiento). El periodo de ejecución era de 3 meses.
“Una vez concluida la temporada 24/25 y ante el no avance de las obras, el CD San José Obrero advierte en su asamblea, que en esas lamentables condiciones no se puede jugar al fútbol, o mejor dicho, no se puede hacer jugar la fútbol a los equipos visitantes (La imagen adjunta es un resumen de la situación en la que se encuentra el campo, donde no hay vestuarios, ni gradas)”, recuerdan.
A partir de este momento el club rojillo se reúne durante el mes de julio con el alcalde (Darío Dolz), concejal de deportes (Charo Rodríguez), exconcejal de urbanismo (Adrián Martínez), representante de la constructora (Eulen) y directivos del club. Se revisan instalaciones de vestuarios y aseos, quedando remates, estimando entre 3 y 4 semanas para terminar y hacer la puesta en servicio de estos espacios.
“Una vez concluida la pretemporada y a una semana del inicio de la 25/26 no hay noticias de la finalización de las obras. La concejal de Deportes y técnico del IMD junto con la constructora se comprometen a recepcionar al menos vestuarios a falta de pequeños ajustes, justo antes del inicio de temporada”.
Esa misma semana la FFCM junto con ayuntamiento se personan en el campo. Se solicita, por parte del ayuntamiento, que la disputa del encuentro se empleen los vestuarios del pabellón Samuel Ferrer, solo para esta primera jornada de liga y con un compromiso a qué en la siguiente jornada, se pueda contar con los vestuarios del campo. La justificación del ayuntamiento de la ‘no firma’ es que el técnico ‘continuaba de vacaciones’. “Finalmente, desde el ayuntamiento se comunica al club que no se va a disponer de los vestuarios hasta que no se termine la obra, contradiciendo lo que durante el último mes se había comprometido”.
De esta forma, en este segundo partido de la temporada ni el club rojillo, “ni los usuarios de la instalación pueden practicar el futbol de forma digna y acorde a una capital de provincia. Una vez más el surrealismo se vuelve cotidiano en el deporte de esta ciudad. Ahora saldrán y nunca mejor dicho a tirar balones fuera para no asumir responsabilidades, eso sí, en cuanto esté el campo, todos a salir en la foto”.